Estaba un vato en un cafe aca bien trajeado con su cigarro bien buen pedo, con su laptop con internet incluido, su nextel aladito y en chinga mande y mande correos aca bien profesional.
En eso pasa uno de los empleados del cafe con su cubeton de agua y jabon limpiando mesa por mesa y el vato del traje se le queda viendo sin aliento, dá un leve suspiro mientras el humo del cigarro le irrita los ojos y dice:
- q-que pinche envidia.